Sin palabras
Yo que siempre tuve réplicas de sobra, ahora me veo callado, mirándome las punteras de las botas. No me lo tengas en cuenta si río por no follar.
Yo que siempre tuve réplicas de sobra, ahora me veo callado, mirándome las punteras de las botas. No me lo tengas en cuenta si río por no follar.
Se intercambiaron los teléfonos, se apuntaron las direcciones. Se estrecharon las manos, se dieron abrazos. Se dieron los besos y se dieron los cuerpos, se intercambiaron los humores, mezclaron los sabores, frotaron sus cuerpos y decidieron no despedirse jamás.
Tiene la piel tan fina que cuando te abraza te sientes como algo antiguo envuelto en papel de seda. Besa concediéndote un deseo y nunca está cuando la necesitas. Termina por convertirse en tu bien más exiguo y preciado. Hace poco me la volví a encontrar y mientras nos callábamos casi todo, nos decíamos todo …
(Por hacerme falta)
Desde que las conocen, mis dias viven disparados, frenéticos, ansiosos por alcanzar tus noches…
Se me rinden las rodillas a las proposiciones indecentes. No nací para olvidarte.
Hoy no vas a morir. Pero si no te lo propones, quizás tampoco vas a vivir. Muerde, besa, azota. Sácale un pellizco al día de donde menos se diría. Mira a alguien de esa forma que tú sabes que mata un poco. Provoca. Pídete una caña más. Rebaña. Vacila. Sóbrate. No dejes el de la …
¿Quién soy en tu cabeza, en tus recuerdos?. ¿Quién seré yo para ti cuando hables a los demás de mí?. ¿Me quitarás peso?. ¿Seré ya menos de lo que fui?. ¿Dirás que fui menos de lo que fui en realidad? .¿Aún vencerá el rencor?. ¿Me añorarás?. ¿Seré uno de cien?, ¿seré uno de diez?, ¿seré …
Y un día ella deja de reír… De mirar a tu boca, pasó a los ojos, y al tiempo, al suelo, o a la pantalla del móvil. Se le volvieron perezosos los dedos, y ya no sabe desatar tu cinturón, y cada vez más conversaciones empiezan con melancolías y «teacuerdas». Y te preguntas dónde se …
Estaba más guapa que nunca, desde que lo dejamos, hacía ya quince o veinte minutos…