Cuando los veranos eran una piscina de tres meses, cuando reinaban los playmobil y los gi-joe, cuando los polos a quince pesetas, cuando el ídolo era el que siempre ganaba a polis y cacos y el mejor regalo era un balón «tango», prometimos que jamás tendríamos novia…
…yo ya llevo siete… y tu?
Yo ninguna, 😛 pero se podría negociar, jajaja.
A tí también te tiran, Birubí?
Jajajjaa, pa que diría nada.
😛
Nunca me ha tirado ninguna, pero nunca se sabe, no?
Supongo que no 🙂
¿Yo? Yo fui lo suficientemente listo -o tímido- como para no prometerlo en voz alta 😛
Da igual no haberlo dicho en alto, o siquiera no haberlo dicho, no ser fiel a uno mismo cuando éra más auténtico ya duele suficiente 😛
Bah! bah! bah! los que más alto lo dicen, más pronto caen.
Tiran… excepto cuando el chico por el que te interesas resulta ser gay. (U____U)