Porque nos gusta jugar a los juegos más difíciles…
…y conoció a la chica que a partes iguales le encantaba y le hacía la vida imposible… y él, incapaz de vivir sin retos, encontró un motivo para levantarse cada mañana…
…y conoció a la chica que a partes iguales le encantaba y le hacía la vida imposible… y él, incapaz de vivir sin retos, encontró un motivo para levantarse cada mañana…
– Nunca cierras los ojos para besar…? – No pienso arriesgarme a darte una sola posibilidad de escape…
El dedo que se ha vuelto adicto a recorrer tus curvas, en la oficina se niega a pulsar otra letra que no sea la «S» mayúscula…
No lo entiendo. Esta es la situación: Edificio de veintitrés plantas. Dos ascensores, y los dos funcionan igual de rapidísimamente y llegan enseguida de la cero a la veintidós… No, en serio, ¿por qué? Hoy no puedo dejar de escuchar One Wing de Wilco, y de comer chocolate…
Puedo hacerte mil promesas -mil digo- y cumplirlas antes de que se acabe la noche, ojo. Las mil. Y me quedaré con ganas de más… Vota sí.