Escribe!
…dice. Y se me vuelve todo una frustración, una impotencia, de no encontrar en los dedos la profundidad con que recuerdo sus historias.
…dice. Y se me vuelve todo una frustración, una impotencia, de no encontrar en los dedos la profundidad con que recuerdo sus historias.
El perejil de todas las salsas, la salsa de todos los botes del frigorífico, se cansó de no conocer las mañanas, de vaciar cajas de ibuprofeno, se cansó de susurrar en rincones oscuros y buscar los gayumbos sigilosamente por los suelos de pisos compartidos… Venció la rabia y se quedó la melancolía, conoció los días …
No se si ya tengo cuarenta y dos, o aún tengo cuarenta y dos.
Sólo bajo la tormenta se descubre quien es refugio.
Se disculpó y se levantó lentamente, la mirada clavada en ella. No podía ser, después de tanto tiempo. No podía ser, con ese color de pelo, con ese corte, con ese mismo brillar. Se despiden en el semáforo. Tres, cuatro veces. Sonríen cada vez que se vuelve a cerrar… y allí siguen. Sin moverse. Sin …