Sólo seguirla con la mirada me resultaba imposible, incluso con el freno de mano echado me estrellaba en su primera curva…
Y aquella estrofa de aquella canción resonando sin parar en la cabeza… «…no siempre estoy dispuesto a vivir…»
Sólo seguirla con la mirada me resultaba imposible, incluso con el freno de mano echado me estrellaba en su primera curva…
Y aquella estrofa de aquella canción resonando sin parar en la cabeza… «…no siempre estoy dispuesto a vivir…»
«… frenando en casi todas las curvas…»
Me vuelve loca esa estrofa.
Que se acelere en mis curvas…
KamikáceMe.
Hay curvas peligrosas… pero inevitables, tienen tu nombre escrito en ellas.
Me pido para siempre ser «el chico de la curva».
…y levantándote las faldas al bailar…
Jajaja, ¡¡ahora das un poco de miedo!!
Espera, vuelvo a verlo sexy 😉
… Que todavía podría encender
dos lunas en tu espalda…
eMe, te echamos de menos.
Etrin no os merecéis mi falta de inspiración… 🙁
Necesito noche…